El Ayuntamiento de Segovia ha concluído, en la tarde de este martes, la retirada de más de 60 tuberías de fibrocemento con amianto, altamente tóxico y prohibido desde el año 2003, después de dos jornadas intensas de trabajo realizado por una empresa de Valladolid especializada y certificada, cuyo coste ha rondado los 15.000 euros.

El cementerio de tuberías, próximo a los depósitos del agua de Segovia, ha estado durante más de un lustro abandonado y sin ninguna protección y solo tras nuestra denuncia pública se han puesto a solucionar este grave problema, ya que además estaba junto a un parque frecuentado por niños y personas mayores.


El consistorio segoviano ofrecerá información en los próximos días de estos trabajos encargados a la empresa Juan Manuel Arranz de Valladolid y cuyo coste ha rondado los 15.000 euros.

Los materiales han sido trasladados en dos trailers a un depósito especial de la provincia de Toledo.


El resto de medios de comunicación de Segovia no se han hecho eco de la noticia.

20/9/2012

Tras la denuncia de Segovia al día, el pasado 16 de agosto de 2012, el Ayuntamiento de Segovia se puso manos a la obra para retirar las cerca de 60 tuberías de fibrocemento ( Uralita con amianto) depositadas de forma irregular, durante años, junto a los depósitos del agua y próximas a varios parques frecuentados por cientos de personas todos los días, incluídos niños de los centros educativos cercanos. Las tuberías son altamente contamienantes, contienen amianto y están prohibidas desde el año 2003.

El asbesto, también llamado amianto, es un grupo de minerales metamórficos fibrosos. Están compuestos de silicatos de cadena doble.

Los minerales de asbesto tienen fibras largas y resistentes que se pueden separar y son suficientemente flexibles como para ser entrelazadas y también resisten altas temperaturas.

Debido a estas especiales características, el asbesto se ha usado en una gran variedad de productos manufacturados, principalmente en materiales de construcción (tejas para recubrimiento de tejados, baldosas y azulejos, productos de papel y productos de cemento con asbesto), productos de fricción (embrague de automóviles, frenos, componentes de la transmisión), materias textiles termo-resistentes, envases, paquetería y revestimientos, equipos de protección individual, pinturas, productos de vermiculita o de talco, etc.

Se ha determinado por los organismos médicos internacionales que los productos relacionados con el asbesto/amianto provocan cáncer con una elevada mortalidad y por ello, desde hace décadas, se ha prohibido su uso en todos los países desarrollados, aunque se continúa utilizando en algunos países en vías de desarrollo.

Una empresa especializada de Valladolid; Juan Manual Arranz San José,  ha sido contratada de urgencia por el Ayuntamiento de Segovia, a la cual ya se la había solicitado presupuesto hace dos años, para la retirada de las tuberías de fibrocemento ( con amianto).

Las tuberías se están enfundando dentro de un perímetro de seguridad y con ropa especial de protección. Las mismas serán trasladadas a Toledo a un lugar seguro donde serán enterradas de forma controlada.

En la rueda de prensa de este jueves, tras la Junta de Gobierno Local, nuestro medio solicitará detalles de la intervención y el coste de la misma.

Llama la atención que tanto el Grupo Socialista, el Grupo Popular e Izquierda Unida no hayan planteado ninguna moción en el Ayuntamiento durante estos años, ni hayan preguntado por este tema tan importante por la contaminación de la zona, próxima a los depósitos del agua y por el abandono de los residuos, sin protección, salvo tras nuestra denuncia, en una zona frecuentada por los ciudadanos.

La Concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Segovia, Paloma Maroto, tomó cartas en el asunto tras ver nuestra información y en tiempo record ha conseguido que la retirada se efectúe esta semana, concluyendo el viernes los trabajos.

23/8/2012

El Ayuntamiento de Segovia ha ocultado, desde primeros de semana, con una malla verde el cementerio de tuberías de fibrocemento (Uralita) que lleva años junto a los depósitos de agua. Las teberías son altamente contaminantes, pueden producir cáncer de púlmón en casos extremos y están prohibidas desde el 2003. Desde el Ayuntamiento nos han comunicado, el pasado viernes, que las tuberías iban a ser trasladadas a un lugar seguro esta misma semana. Esperemos acontecimientos.

16/8/2012

El Ayuntamiento de Segovia, muy preocupado siempre por la gestión de los residuos de la ciudad y por el medio ambiente en general, está permitiendo que junto a los depósitos del agua de Segovia, en la Avenida Juan de Borbón se acumulen desde hace años más de 50 tuberías de uralita (fibrocemento), material prohibido desde el año 2003 y altamente contaminante.

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Este tipo de material tiene que ser retirado por una empresa especializada, inscrita en el RERA, y autorizada en el desmontaje y gestión de fibrocemento, están prohibidas desde 2003.


Su destino final será un vertedero de residuos  (a una celda de seguridad), pues aunque son un residuo peligroso, la Orden MAM/304/2002 hace una excepción con este tipo de residuo. 

La demolición de elementos en fibrocemento que contengan asbestos (amianto) es muy peligrosa y debe estar estrictamente controlada, ya que las microfibras de asbesto elevan enormemente el riesgo de cáncer de pulmón al ser inhaladas (entre otras enfermedades)

El origen del fibrocemento se remonta a 1900, año en el que fue ideado por Ludwig Hatschek; un ingeniero austríaco. Para la fabricación del fibrocemento, originalmente se utilizaba el amianto como fibra de refuerzo, pero cuando se hicieron patentes los problemas de asbestosis que éste provocaba, se fue abandonando paulatinamente su uso en los distintos países. (En España, a partir de los años 1990). Se ha intentado sustituir el asbesto por otros tipos de fibras, como fibras de celulosa, fibra de vidrio, o fibras vinílicas. Pero esta sustitución sólo ha tenido un éxito parcial. Sin embargo, los tubos de todo tipo, que se fabricaban mediante centrifugado del material, no han logrado ser reproducidos con celulosa, por lo que ha debido abandonarse su uso.

En España se comercializó bajo la marca comercial Uralita.

El número de tuberías es de 50 aproximadamente, todas ellas en mal estado, y al alcance de los peatones que pasan por la calle del nuevo barrio de Comunidad de Villa y Tierra de Segovia.

Hace años las tuberías estaban lejos de viviendas, pero en la actualidad existe un bloque a menos de diez metros de distancia.

Con frecuencia se ve a niños jugando encima de las tuberías, que además están rotas.

Esta situación es lamentable y desde nuestra redacción esperamos una respuesta rápida por parte del Ayuntamiento.